Un vendedor con mucha experiencia sabrá que a la hora de ofrecer un producto es necesario identificar con qué tipo de cliente está tratando.
Los vendedores principiantes tienen una característica y es que, si un cliente los mira con interés o los saluda, se lanzan de una vez a ofrecer el producto sin saber que es un graso error.
Lo primero que debe hacer un vendedor antes de ofrecer su producto o servicio es identificar con qué tipo de cliente se ha topado para saber qué estrategia de venta debe aplicar.
A continuación les enumeramos los tipos de clientes que existen:
1. El autosuficiente. Le encanta discutir y utiliza un tono sarcástico y agresivo. Además, nunca quedará contento.En este caso, lo que debe hacer el vendedor es no tomárselo como algo personal, dejar hablar al cliente y jamás discutir con él. Este tipo de cliente, si realmente está interesado, cerrará la compra.
2. El distraído. Es aquel cliente que no sabe ni dónde está parado. En este caso, el vendedor debe demostrar mucho interés y curiosidad por lo que su cliente necesita. Lo mejor es elaborar un único argumento porque es poco probable que refute si se le convence.
3. El reservado. Impasible, tímido y desconfiado. Para atraerlo es necesario ser muy amable, plantearle varias alternativas y repetir los argumentos de diferentes formas.
Vos como vendedor tenés que seguir el ritmo de tu cliente, no impacientarte ni presionarlo para que tome una decisión.
4. El hablador. Hay personas que están más interesadas en hablar que en comprar. A estos clientes hay que atenderlos con simpatía y hablarles del tema comercial para descubrir rápidamente si comprarán o no.
5) El indeciso. Hay clientes que no pueden decidir por sí solos. A estos nunca hay que dejarlos solos. El vendedor debe apoyarlos con cada decisión y no plantearles muchas alternativas que le generen un mar de dudas.
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