Siguen desapareciendo empresas en todo el mundo por no haber migrado a tiempo al mundo digital ni haber implementado una estrategia de marketing por Internet.
Uno de los ejemplos más emblemáticos es el de Kodak, que nunca apostó al marketing digital y fue rebasada por empresas que nacieron siendo digitales como Instagram, la cual le ganó terreno en el negocio de la fotografía a una velocidad increíble.
Cuando una empresa no toma las decisiones de cambio a tiempo corre el enorme riesgo de dejar de ser relevante para la gente, y hoy la gran mayoría del público con capacidad de compra en todos los rubros está en Internet.
La importancia de que las empresas se dirijan hacia una buena práctica del marketing digital es que les ayuda a conocer mejor a su consumidor, entenderlo, encontrar nichos y los diferentes perfiles de personas que compran sus servicios y las razones por que lo hacen y las que no.
En todo caso habrá que recordar que el miedo al cambio de esa empresa viene de antes de Instagram: pues su negativa a incluir cámaras digitales en su repertorio hizo que la quiebra comenzara a configurarse mientras la competencia no paraba de crecer, pero en ese entonces todavía era posible rectificar, aceptar que todo el mundo quería cámaras digitales, fabricarlas y sobrevivir.
Pero apareció Instagram, y ese mismo año la bolsa de Nueva York le prohibió a Kodak seguir cotizando porque el valor de sus acciones se mantenía por debajo de un dólar.
Inevitablemente Kodak se declaró en bancarrota. Sin embargo, en enero de 2015 la compañía resurgió con el anunció de su primer teléfono inteligente, un dispositivo Android que supuso una reconsideración a su apatía por el mundo digital y un intento por sobrevivir en un mundo que evidentemente cambió.
El problema de Kodak no fue, en todo caso, la aparición de Instagram, sino que desestimó la necesidad de una presencia más fuerte en el espacio donde estaba la mayoría de la gente: Internet. Así fue como el imaginario colectivo comenzó a relacionar la fotografía con lo que ofrecía Instagram y Kodak dejó de ser importante.
Si querés evitar que a tu empresa le ocurra lo mismo, ni lo pensés: migrá al mundo digital y aplicá una estrategia de marketing digital para que todos tus clientes potenciales conozcan tu marca.
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