A primera vista, las peluquerías y salones de belleza parecen los negocios más rentables del mundo: tijeras, mano de obra, máquinas, ganar, ganar, ganar. Pero la realidad es otra. En Estados Unidos, por ejemplo, los dueños de establecimientos como estos solo ganan en promedio 30.000 dólares al año, y esa realidad se extiende por todo el mundo.
Claro que ese promedio es empujado hacia arriba por unos cuantos negocios exitosos y hacia abajo por un montón de gente que tal vez esté a punto de quebrar. El motivo es fácil de detectar: la publicidad.
Para ser más específicos, se trata de falta de marketing digital local y de marketing en general.
Si una peluquería atiende solo a los mismos clientes de siempre, corre el riesgo de que algún día estos decidan marcharse y su negocio quiebre. Que eso ocurriera hace 20 años era posible, pero que ocurra ahora es muy difícil porque con un buen manejo de las herramientas digitales es posible aumentar la cartera de clientes en el mediano plazo.
A continuación, cinco consejos para que una peluquería trascienda de cualquier crisis y de cualquier promedio negativo.
1. Aplicá marketing digital local, de manera que cuando alguien escriba desde tu ciudad en Google "peluquería" sea tu negocio el que le aparezca reflejado.
2. Utilizá las redes sociales, y sobre todo Instagram. Cuando veas un potencial en un cliente, hazle un "antes y después" con tu celular y demostrá lo bien que trabajan en tu negocio. Además, en promové concursos para que la gente esté pendiente de tus publicaciones: puede ser uno semana, de manera que al final de la semana o a principios de la siguiente pagues el premio --un peinado o corte, por supuesto.
3. Creá una lista de clientes que te permita saber quiénes son los que tienen tiempo sin visitarte, de manera que recuperes antiguos clientes mientras ganas nuevos.
4. Abrí un blog que puedas actualizar todos los días en el que muestres las últimas tendencias. Si nombrás a personas famosas y escribís sobre sus peinados o estilos, tendrás más posibilidades de aparecer en los motores de búsqueda de internet.
5. Promocioná las horas en las que menos visitas recibas. Si nadie va los miércoles en la tarde, poné ese día a mitad de precio y maravíllate de la cantidad de gente que irá a tu negocio.
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