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Cómo convertir una gran idea en un negocio real y rentable


Casi todo el mundo tiene grandes ideas a lo largo de la vida, pero casi nadie las ejecuta. Es que realmente lo difícil es eso. Decía Steve Jobs que quienes no se ocupan de trabajar por sus sueños son contratados para trabajar por los sueños de otros, y sin embargo la realidad es que la gente también tiene que pisar tierra y ocuparse de sobrevivir. 

Si se te acaba de ocurrir una idea brillante, lo primero que tienes que hacer es investigar a ver si más nadie la está ejecutando. Resulta que el mundo envía mensajes parecidos a todos sus habitantes y puede ocurrir que dos o más personas tengan la misma idea sin que se trate de un plagio. Recuerda que nadie es una isla: todos estamos sometidos más o menos a la misma información.

Pasada esa etapa, lo siguiente es ver si la idea en cuestión es realmente tan brillante. ¿Será muy costoso ejecutarla? ¿Es rentable? ¿Las leyes de este país me permitirán ejecutarla?

Ahora hagamos un paréntesis: Por si acaso no te parece obvio, NO SE LA DIGAS A NADIE. Es cierta la supuesta mística del silencio en esto de los negocios, y la mayoría de las veces se debe a razones bastante realistas como el plagio, las malas intenciones de los demás o al desgaste propio de quienes hablan mucho y hacen poco.

Lo siguiente es registrar la idea para que legalmente sea tuya. A veces a la gente se le olvida ese pequeño detalle y luego alguien le plagia el concepto, lo registra y el que tuvo la idea termina como un estafador.


A continuación, conviértase en un emprendedor evitando los errores que consignamos AQUÍ.
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